Mitad de semana, podríamos volver a decir aquello de "¡qué rápido pasa el tiempo cuando uno está disfrutando!"... Hoy hemos visitado el Colegio Fe y Alegría 55, en Yamakentza, dirigido por los padres jesuitas desde hace más de 45 años. De camino allí hemos pasado por varias poblaciones como Nazareth o Imaza. Desde Imazita hemos tomado un bote para llegar al Colegio Jesuita. Allá estudian cerca de 280 alumnos de Primaria y Secundaria en régimen de internado. Sólo hay tres jesuitas a su cuidado. De nuevo, queda claro que si funciona es por el trabajo de los propios alumnos. Ellos se encargan del cuidado del colegio y sus inmediaciones, cuidado de animales (cerdos, patos, cuyes, etc.) y demás trabajos agropecuarios. Los hemos saludado en sus clases, nos han mostrado la capilla, el comedor, la losa del fútbol, etc. El Colegio es similar en sus dependencias al de las Hermanas, pero se diferencia por lo escarpado del terreno, pareciera que hay siete colinas en este Colegio, y cada una cuenta arriba con aula y dormitorio. Hemos dialogado con el Padre Carlos, con el Padre José Carlos y Daniel, jesuitas. Nos han hablado de su trabajo Pastoral con los alumnos, las dificultades que encuentran en su día a día, etc. Como nos ha acompañado Teresa, también se han puesto al día de sus vidas, pues hacía tiempo que no se veían. Posteriormente, hemos tomado un bote de vuelta y una combi para viajar a Chiriaco. La carretera ha experimentado mejoras, pero de improviso nos topamos con un camión que se había quedado atrapado en un badén embarrado por las lluvias. No podía avanzar y tuvimos que esperar a que otro camión lo remolcara. Han sido momentos de desorganización pues todas movilidades que se encontraban allí querían pasar en primer lugar. Finalmente hora y media después de lo previsto arribamos a Chiriaco. Comimos y nos pusimos a preparar la reunión con los profesores de Secundaria del Colegio de las Hermanas. Hemos compartido ideas y desvelos. Después se contextualizar la situación educativa española, hemos analizado cuáles creíamos que eran las causas del alto fracaso escolar español y peruano; para después compartir metodología y recursos para las clases y cada asignatura. Ha sido enriquecedor para ambas partes, siempre aprendemos algo nuevo acá. Al terminar rezamos con las hermanas en su capilla, cenamos y reunimos a las alumnas de 3o, 4o y 5o de Secundaria para mostrarles las fotos que tomamos hace dos años. Hemos recordado con mucho cariño a Cecilio, las alumnas lo recordaban igualmente. Con ellas se ha comenzado a preparar un "lip-dub" que muestre actividades, infraestructuras y personal educativo del colegio. La idea les ha parecido ilusionante. Ya os contaremos cómo resulta todo mañana... Esperemos que no llueva y desluzca la actividad. Por último, hemos quedado con el grupo de alumnas que se encarga de la catequesis de los que tomarán la comunión este año, para acompañarlas mañana en su tarea. Seguimos sorprendiendonos de su organización, implicación e ilusión; en especial si tenemos en cuenta que provienen de una cultura completamente distinta a la nuestra y cuya concepción de la vida y de Dios distan notablemente. Os tendremos informados. Parece que nos llega una señal de baja intensidad de Wi-Fi a través de la cual os podemos relatar nuestra experiencia. Un fuerte abrazo, en menos de una semana esperamos veros por España.
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